Los menonitas en Quintana Roo han sido señalados por provocar incendios en más de 5,200 hectáreas de selva en los últimos tres años con el fin de transformar el uso de suelo para actividades agrícolas.
Chetumal (Marcrix Noticias)-En los últimos tres años, los menonitas en Quintana Roo han sido acusados de provocar incendios que han devastado aproximadamente 5,200 hectáreas de selva, según información de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa). Estas acciones tienen como objetivo forzar un cambio de uso de suelo que les permita utilizar la tierra para fines agrícolas.
Desde 2008, se han identificado acciones ilegales similares perpetradas por la comunidad menonita, especialmente en las localidades de “4 Banderas”, “El Bajío”, “El Paraíso” y “San Fernando”. A lo largo de este tiempo, se han presentado 54 denuncias en su contra por incendiar áreas protegidas de flora y fauna en los municipios de José María Morelos, Bacalar, Felipe Carrillo Puerto y Mahahual.
Las sanciones impuestas a los menonitas incluyen multas acumuladas de 14.8 millones de pesos y la clausura de las superficies afectadas, las cuales ya habían sido desmontadas con maquinaria pesada para el establecimiento de cultivos de sorgo y chile habanero. No obstante, estas medidas no han logrado detener la devastación.
Recientemente, Sebastián Vela Góngora, comisariado ejidal de la comunidad Carolina en José María Morelos, presentó una denuncia formal ante las autoridades de Protección al Ambiente, acusando a las comunidades menonitas de ser responsables de los incendios en la selva baja de las zonas cercanas.
Vela Góngora declaró: “Ya habíamos advertido que los incendios no son causados por la sequía ni por otras causas naturales, pues se nota la acción del hombre para limitar las llamas a ciertas zonas. Además, hemos detectado que después de una devastación de la selva, al otro año llegan los menonitas para implantar monocultivos”.
Ante esta situación, las comunidades afectadas han solicitado que la Profepa realice una investigación exhaustiva y considere sanciones más severas, incluyendo el posible exilio del estado para los responsables, con el fin de realmente disuadir estas prácticas destructivas.