CFE opera al límite en Quintana Roo, requiriendo una inversión de 800 millones de pesos para cinco nuevas subestaciones que aliviarían la crisis energética a corto y mediano plazo.

Cancún (Marcrix Noticias)-Los apagones en Quintana Roo continuarán debido a que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) está operando al límite de su capacidad. Según la empresa paraestatal, se necesita una inversión de aproximadamente 800 millones de pesos para instalar cinco nuevas subestaciones que resolverían la situación a corto y mediano plazo.

Miguel Ángel Ruíz, del departamento de comunicación de la zona de transmisión de la CFE en Cancún, explicó que actualmente la generación diaria de energía eléctrica es de 700 megawatts, que coincide con el consumo. Sin embargo, durante el verano, el consumo puede aumentar a 900 megawatts, además de que las instalaciones actuales están volviéndose obsoletas.

“Quintana Roo tiene generación energética, aunque es poca, debido a que las plantas establecidas en la entidad funcionan con diésel, lo cual es más costoso para la CFE. Por ello, los proyectos de ductos de gas están planificados en el estado vecino”, detalló Ruíz.

De las subestaciones proyectadas, dos deberían estar operativas este año. Este proyecto busca evitar un colapso en el suministro eléctrico de la ciudad, que experimenta un alto consumo.

Los avances y las acciones en marcha fueron presentados al sector empresarial durante una reunión encabezada por el Consejo Coordinador Empresarial del Caribe. Eduardo Martínez, presidente del organismo, indicó que la CFE les informó que estas nuevas subestaciones permitirán el suministro eléctrico a 150 mil nuevas viviendas en los próximos cinco años, y 10 mil cuartos en la zona hotelera.

“Entre las acciones está el fortalecimiento de la subestación Nizuc, que permite el suministro a 20 mil viviendas en Cancún. Las nuevas subestaciones estarán ubicadas en Polígono Sur, Arco Norte y Rancho Viejo, y se espera que estén listas en un plazo de tres años, mientras que las dos restantes en un plazo de cinco años”, explicó Martínez.

El sector empresarial planteó la necesidad de realizar reuniones trimestrales para conocer los avances y discutir nuevas inversiones, además de impulsar la construcción de una planta de ciclo combinado que genere mayor energía.

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